Estas dos amigas visionarias fundaron Metamórfica Lab con la intención dar una solución sostenible a productos de HDPE (polietileno de alta densidad, por sus siglas en inglés) que se utilizan una sola vez, como los envases de detergentes, limpiadores, botes de shampoo y acondicionador, y con ello, a través de lo que ellas definen como “reciclaje creativo”, generar muebles “únicos, sustentables y coloridos”.
Metamórfica Lab, con sede en Bogotá, ha crecido con los años, pero en un inicio María Paula y María Alejandra hacían de todo: desde recolectar los envases, limpiarlos y triturar el material hasta realizar la selección de los plásticos por color para crear el material que permitiera diseñar sus piezas irrepetibles, dejando la menor huella ecológica posible en el planeta.